Burnout

Reproducido con permiso del Instituto Headington, ver artículo original aquí
Foto de Ian Espinosa en Unsplash

“Burnout” es algo que he oído a menudo en mis conversaciones con la gente. Nuestro auto-test para el burnout (¿Está usted mostrando signos de “Burnout”?) ha sido una fuente muy popular a lo largo de los años. A través de mis consultas con personas que trabajan ayudando y que responden a emergencias, empecé a visualizar el problema del “burnout” en términos de construir un castillo de arena en la playa. La presión y las demandas del trabajo son como las olas del océano: siempre estarán allí. Si el castillo de arena es el resto de tu vida (familia, amigos, salud, metas personales) tiene que construirse con la presión constante del trabajo en mente.

Quiero que te plantees cómo defines actualmente el “burnout”. La mayoría de la gente asocia “burnout” a una gran carga laboral, y la fatiga o estrés como resultado. Esto es un componente muy importante del “burnout” pero las investigaciones indican que esto no es todo el paquete. Con solo la fatiga, mucha gente encuentra una manera de cortar, tomarse un descanso, o incluso adaptarse a trabajar más horas en una semana (si les gusta su trabajo).  El “burnout” parece que ocurre cuando están presentes dos factores adicionales con la fatiga: el cinismo y la ineficacia.

El cinismo sobre nuestro trabajo significa que ya no sentimos que la misión más grande o las metas de nuestro proyecto son alcanzables o importantes. Esto puede estar causado por diferentes cosas, tales como la falta de cooperación en un equipo, o varias barreras estructurales que pueden hacer el trabajo de desarrollo o alivio de emergencias ineficaz. La gente es capaz de estirarse y aceptar los retos cuando sienten que sus esfuerzos significan algo, pero no cuando sienten que su trabajo no tiene sentido.  La ineficacia se refiere a su sentido personal de productividad o esfuerzo reducido. A menudo oigo a la gente describir esta dimensión como la experiencia de trabajar la misma cantidad de horas, pero teniendo cada vez menos que ofrecer. La auto-observación de que uno no está “rindiendo” puede ser una experiencia angustiosa por sí misma.

Así pues, piensa en el “burnout” como una fórmula que consta de tres partes:

“Burnout”= Sobrecarga laboral /Fatiga + Cinismo + Ineficacia

Ahora bien, ciertas organizaciones, empleos y roles pueden ponerte en mayor riesgo en cualquiera de estas áreas. El campo de la ayuda es especialmente exigente. Pero también hay maneras para ser estratégico a la hora de evitar el “burnout”. He aquí algunas ideas:

  • Comprometerse con hábitos de vida laboral equilibrada, puede ayudar, como asegurarse de que estás fuera de tu ordenador del trabajo después de una cierta hora, o marcarte un horario de cosas durante tus pausas que te llenen y te proporcionen descanso. Sueño adecuado, dieta nutritiva, ejercicio regular, acceso a apoyo social, son todo cosas que pueden obrar de forma preventiva contra la fatiga, pero tienes que mantenerlas en su sitio para que funcionen.
  • Debes saber a qué eres propenso. Algunas personas están predispuestas a sentir cinismo o ineficacia en cuanto al trabajo, porque se han sentido así en otras áreas de sus vidas.
  • Sé consciente de cómo te sientes. Los signos de cinismo o fatiga nunca aparecen todos de una vez; se desarrollan gradualmente.
  • No ignores las señales tempranas de aviso. A menudo el momento más eficaz de intervención, es cuando empiezas a sentirte estresado, pero mucha gente espera hasta que está al borde del colapso antes de darse permiso para pedir ayuda. Si justo estas sintiendo un o dos de los componentes del “burnout”- este es un momento muy importante para pedir apoyo a la familia, colegas, amigos o a un profesional de la salud mental.

Nota del traductor: Sufrir “burnout” sería estar quemado, fundido, extenuado, exhausto, agotado, acabado, consumido.
Pronunciación: [b3rnaut]